Desintegración del Imperio Romano

Analizaremos en esta sección la profecía sobre los pies de hierro y de barro de la estatua del sueño de Nabucodonosor; y la cabeza de la bestia espantosa y terrible de la visión de Daniel, la cual tenía, como ya sabemos, diez cuernos. Veremos ahora el cumplimiento histórico de estos símbolos proféticos.

Contaremos con el recurso de usar algunos documentales de Canal Historia para probar el aserto profético-histórico. Es obvio que los especialistas productores de estos documentales no tienen la más pequeña intención de ligar la historia con la profecía bíblica. Pienso que ni siquiera lo tienen en cuenta. Sin embargo, algunos de sus criterios sobre los hechos históricos nos sirven a los creyentes en las profecías, para demostrar que nuestra interpretación de los sucesos históricos tiene sentido.

Por ejemplo, en el documental sobre Atila y los hunos, el locutor dice:

“…son maestros en la estrategia militar, brillantes diplomáticos internacionales y poderosos motores de cambio. En su implacable apuesta por la gloria, los hunos dejarán una marca indeleble en la historia, desencadenando poderes oscuros que abrirán el mundo a un nuevo orden”. «En realidad la vida de Atila el huno nos recuerda lo costoso y sangriento que puede ser el intento de un hombre por cambiar el mundo. Su reinado de ocho años cambió a Europa para siempre…»

Así vamos a encontrar con alguna frecuencia, comentarios sobre los drásticos cambios que trajeron a Europa las invasiones de los bárbaros. Noten cómo estos autores de Canal Historia reconocen que tales invasiones condujeron a la humanidad hacia un «nuevo orden mundial».

Lo impresionante de esto es que esos cambios radicales, ese “nuevo orden” que irrumpe tras la caída del Imperio Romano de Occidente por la invasión de los bárbaros, estaban profetizados por Daniel más de mil años antes de que ocurrieran.

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